Cumbre del G-20

Proclaman acuerdo sobre principios

Artículo publicado el 16/11/2008 Ultima reactualización 16/11/2008 17:41 TU

Sesión Plenaria de la Cumbre del G-20 en Washington.
Foto: Reuters

En espera de la reacción de los mercados financieros en Asia y Europa, los analistas discrepan sobre el balance de la Cumbre realizada en Washington para refundar el sistema financiero internacional. Los más optimistas destacan que es la primera conferencia internacional que reúne dirigentes de países desarrollados y emergentes para hacer frente a las consecuencias de la globalización financiera. En el extremo contrario, los detractores afirman que en ausencia del presidente electo de Estados Unidos, los mandatarios postergaron la toma de decisiones concretas. George W. Bush reiteró sus advertencias contra el proteccionismo.

La Cumbre fue promovida por los principales países europeos y aceptada por el presidente saliente de Estados Unidos, después de que se hiciera evidente que las primeras medidas adoptadas eran incapaces de frenar la crisis del sistema financiero y sus repercusiones en las economías reales. Los mandatarios del Grupo de los 8 y los de doces países emergentes (China, India, Rusia, Brasil, México, Argentina, Arabia Saudita, Indonesia, etc.) firmaron este sábado un amplio documento intitulado Declaración de la Cumbre de los Mercados Financieros y la Economía Mundial. En su primer acápite, la declaración afirma la determinación de los firmantes “a reforzar la cooperación y trabajar coordinadamente para restaurar el crecimiento global y lograr las reformas necesarias de los sistemas financieros globales”. La declaración atribuye el origen de la crisis actual a la opacidad del sistema financiero que permitió la toma excesiva de riesgos, pero también a la ausencia de coordinación de las políticas macroeconómicas y la falta de reformas estructurales. La Declaración establece en sus acápites 8 y 9 los principios para la reforma de los mercados financieros y asigna algunas tareas a los principales actores económicos, pero no se pronuncia sobre la naturaleza de las regulaciones que deberán ser introducidas ni sobre las instituciones que serán responsables de aplicarlas.

La Declaración deja a la discreción de los países miembros del G-20 la implementación de medidas adaptadas a los respectivos marcos nacionales, y anticipa una evaluación de las acciones a fines de marzo. Los líderes volverán a reunirse durante el próximo mes de abril, cuando el futuro presidente de Estados Unidos haya cumplido sus primeros cien días en el poder.

Las bolsas de los países del Golfo Pérsico han sido las primeras en reaccionar después de la Cumbre de Washington, mostrando que la Declaración no ha sido capaz de transmitir confianza a los mercados financieros.

Escuchar las declaraciones de Dominique Strauss-Kahn, director general del Fondo Monetario Internacional.