Reunión de MERCOSUR en Brasilia: los ministros de Relaciones Exteriores Jorge Taiana, de Argentina, Celso Amorim, de Brasil, y el vice ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Oscar Rodríguez.
(Foto: Reuters)

Reunidos en Brasilia para buscar una respuesta común a la crisis financiera internacional, los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y otros seis países sudamericanos (Chile, Bolivia, Perú, Ecuador, Venezuela y Colombia), acordaron que los Estados de la región deben enfrentar la crisis global con más integración y ampliación de los flujos de comercio. Los cancilleres y ministros de Hacienda de la región pidieron también una nueva "arquitectura financiera" mundial. "Esta reunión marcó el inicio de un proceso donde hemos intercambiado experiencias sobre las medidas de nuestros países ante la crisis y buscar aproximar posiciones sobre cómo actuar en el futuro", apuntó al fin del encuentro el canciller de Brasil, Celso Amorim. "Lo peor que nos puede pasar es que por causa de la crisis volvamos a mecanismos que usábamos en los años 60, que volvamos a un proteccionismo añejo", declaró el canciller de Chile, Alejandro Foxley. La declaración final de la reunión insistió en que las naciones de la región "se encuentran en mejores condiciones que en el pasado para enfrentar los desafíos de la crisis".

Sin embargo, los analistas regionales destacan también que la apuesta de la integración no es una poción milagrosa, tanto más cuanto que los países de América del Sur dependen de las materias primas cuyos precios se han visto fuertemente afectados hacia abajo por la crisis financiera.

Entrevistados: Aldo Ferrer, profesor y economista argentino; y Harold Bayer, economista y directivo del Centro de Estudios Públicos (CEP) de Santiago de Chile.