Artículo publicado el 28/04/2009 Ultima reactualización 28/04/2009 13:41 TU
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodriguez Zapatero, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en la Moncloa, sede del Gobierno español.
Foto: Reuters
"Cada vez que la democracia española tenga necesidad de luchar contra esos asesinos, podrá contar con la República francesa", proclamó este martes el presidente Nicolas Sarkozy ante el Congreso de los diputados españoles, un honor reservado a los mandatarios de los países más allegados.
"La lucha de las ideas se lleva a cabo en el Parlamento, los que quieren ganar en democracia utilizando bombas, matando inocentes, no son más que asesinos y Francia luchará contra ellos hasta el final", dijo el jefe de Estado francés, que preside el martes junto al jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, la XXI Cumbre bilateral anual.
En su discurso, Sarkozy anunció que Francia y España crearán “un verdadero estado mayor conjunto sobre la seguridad, para conducir nuestra lucha contra el terrorismo, venga de donde venga. Para combatir también, con la misma determinación, los tráficos de drogas que gangrenan nuestras sociedades y causan tantas víctimas entre los jóvenes".
En el inicio de su mensaje, el presidente francés rindió homenaje al rey de España por su “papel decisivo” en el golpe de Estado del 23-F, que definió como “el último combate entre la democracia y la dictadura”.
España al G-20
En esta oportunidad, Sarkozy volvió a evocar dos temas a los que a se refirió el lunes en una cena de gala en el Palacio Real: la necesidad de que España esté como miembro de pleno derecho en las cumbres del G-20 y el refuerzo de las comunicaciones entre los dos países vecinos a través de los Pirineos.
"España no es sólo una gran democracia, también se ha convertido en una gran economía, se ha abierto, se ha modernizado, se ha equipado", dijo Sarkozy.
El presidente francés dijo que había que pasar de la voluntad política a la toma de decisiones para permitir la unión ferroviaria a través de la alta velocidad y líneas de alta tensión entre Francia y España. Sarkozy se comprometió a que el tren de alta velocidad español, AVE, entre España y Francia esté en servicio dentro de tres años. Entonces, el tren llevará a los pasajeros de Barcelona a Lyon en menos de cuatro horas.
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